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Edición 363

2LASCOSAS

LAS COSAS, COMO SON

El próximo terremoto

podría ser político y económico

Jorge Santa Cruz (*)

(Exclusivo para Voces del Periodista)

SON LAS 13:14 HORAS DEL 29 DE SEPTIEMBRE DE 2017.

Han transcurrido diez días, exactamente, del terremoto de magnitud 7.1 que sacudió al centro de la República Mexicana.

ALGUNASestadísticas oficiales fluyen de manera rápida, como no sucedió sucedió cuando la tierra dejó de temblar:

  • Personas fallecidas: 355
  • Viviendas dañadas: 150 mil
  • Mexicanos sin vivienda: 250 mil
  • Escuelas afectadas: 12 mil 931
  • Negocios afectados: 328 mil
  • Réplicas del sismo del 19 de septiembre: 39
  • Réplicas del sismo del 7 de septiembre: 5 mil 612
  • Costo preliminar de la reconstrucción: 37 mil 500 millones de pesos.
  • Donativos recibidos del extranjero: 36 mil millones de dólares.

Sin embargo, la información es parcial. No permite tener una visión clara de la circunstancia de la Nación.

No se sabe, por ejemplo, cuántas personas quedaron atrapadas bajo toneladas de escombros; tampoco, cuántos derrumbes fueron ocasionados por la corrupción de funcionarios, directores responsables de obra y propietarios de inmuebles.

Esta información parcial genera, por lógica, una gran incertidumbre, como la que envuelve la tragedia del Colegio Enrique Rébsamen y del fallido rescate de una niña inexistente: Frida Sofía.

Es la misma incertidumbre que lastima a quienes ignoran qué pasó con los familiares y amigos que estaban en el edificio de Álvaro Obregón 286, en plena colonia Roma.

O la que agobia a los deudos de las víctimas que murieron por el derrumbe de la fábrica textil, localizada en la calle de Chimalpopoca, del Centro Histórico de la capital mexicana. Tragedia similar a la de las costureras de 1985.

O la que se manifiesta entre quienes vieron perderlo todo con la caída del edificio de la calle de Coquimbo, en Lindavista, donde la negligencia del jefe delegacional en Gustavo A. Madero, Víctor Hugo Lobo Román, evitó el rescate con vida de una mujer española que había pospuesto el regreso a su país, por enfermedad. (Lobo se había “destapado” apenas 16 días antes del terremoto, el 3 de septiembre, como “aspirante” a Jefe de Gobierno de la Ciudad de México).

De la desinformación al enojo social

El 22 de septiembre, la opinión pública se enteró por las redes sociales, de que el Mando Policíaco Único del Estado de Morelos, a cargo de Alberto Capella, interceptaba a cuanta camioneta o camión transitara por la entidad, con ayuda para los damnificados.

Uno de los choferes afectados, que procedía de Michoacán, hizo público su caso a través de las redes sociales. Se supo, entonces, que las fuerzas policíacas de Morelos tenían la orden de llevar los víveres, los medicamentos y demás artículos, a una bodega del Sistema Estatal para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), organismo que está a cargo de Elena Cepeda de León, esposa del gobernador Graco Ramírez. ¿Para qué? Para etiquetar los productos con los nombres de ambos.

¿Cuántos transportes con ayuda fueron despojados de sus respectivos cargamentos? Nadie lo sabe. ¿Graco Ramírez y Elena Cepeda serán investigados y, en su caso, sancionados? Lo más seguro es que… ¡quién sabe!

Más preguntas sin respuestas.

El próximo sismo

EL SECRETARIO de Hacienda y Crédito Público, José Antonio Meade Kuribreña, el “tapado” del “Estado Profundo” mexicano para la Presidencia de la República, aseguró el 29 de septiembre, que las estimaciones económicas y la consolidación fiscal no se verán afectadas por los terremotos.

Sin embargo, el investigador José Francisco Reyes Durán, economista de la Escuela Nacional de Estudios Superiores (ENES) León, de la UNAM, declaró que el costo del sismo que afectó a la Ciudad de México, Morelos, Puebla, Oaxaca y Chiapas, representará entre el 1 y 3% del PIB del país.

Para el especialista, los efectos no se han podido calcular con claridad, debido a que todavía hay muchos inmuebles afectados. Dijo, sin embargo, que se tienen algunos cálculos en el sentido de que la reconstrucción costará alrededor de mil 397 millones de dólares.

“Es una cifra alta, pero no tendrá efecto significativo en el ritmo de comportamiento de la economía global de México; sin embargo, el hecho de que sea un 1 o 3%,     -México iba a crecer entre 1.5% y 2.5%- sí tendrá un efecto significativo. Ese crecimiento quedará limitado: la economía no va a crecer este año”.

Con una economía que no crecerá, y con una estabilidad nacional comprometida por la sucesión presidencial, es lógico pensar que haya entre los integrantes de la “clase política” quienes codicien los 36 mil millones de dólares llegados del extranjero, a despecho de que el propio Meade los haya calificado ya de “miserables”.

Es cierto que los sismos no se pueden predecir, aunque es sabido que en el estado de Guerrero se ha acumulado una gran energía sísmica. Deseamos que esto no derive en otra tragedia.

La predicción de los terremotos políticos y económicos tampoco es segura. Sin embargo, dadas las actuales circunstancias de México, vemos que la sociedad mexicana volvió a medir sus fuerzas, y volvió a dar a la “clase gobernante”, una lección de verdadera solidaridad.

Es notorio el enfado social hacia los funcionarios que no estuvieron -y siguen sin estar- a la altura de las circunstancias. Por lógica, ese enfado se hará visible en las elecciones del próximo año.

Si la corrupción criminal exhibida por los sismos queda -como es usual en nuestra Patria- en una descarada impunidad, y si la reconstrucción se vuelve otro lucrativo negocio para los poderosos, entonces sería factible predecir un gran terremoto político y económico en México, para el segundo semestre del año próximo.

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