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SIRIA:

VÍCTIMA DE LA CONSPIRACIÓN YANQUI

JACQUES BOMBARDIER RENAUD

(Exclusivo para Voces del Periodista)

 

 

El gobierno de Barak Obama ha volteado sus ojos hacia un viejo objetivo de los Estados Unidos: el control y predominio sobre Siria, nación políticamente clave y geográficamente estratégica en pleno corazón del Oriente Medio y del mundo árabe, sin embargo, Norteamérica y sus aliados de Israel y Arabia Saudita han olvidado una cosa muy importante, que Siria no es Libia, ni Egipto, ni mucho menos Marruecos, Túnez o Bahrein.

 

 

Bashar al Assad
presidente de Siria

 

Para los observadores internacionales serios y los más reconocidos estrategas geopolíticos del mundo actual, el caso de Siria guarda aspectos muy distintos a los del resto de los estados árabes que están viviendo la llamada “Primavera árabe”, cuyo efecto dominó tiene una mano negra que inició el primer empujón de las fichas del tablero mundial: Estados Unidos. En efecto, el caso del estado sirio bajo el mandato de Bashar al Assad, presenta factores que no encuadran dentro de las estrategias típicas de la política norteamericana tras bambalinas para desestabilizar a esa nación y justificar ante el mundo una caída más, de un gobierno supuestamente “enemigo de los derechos humanos, las libertades y la paz”.

 

Es por ello que la administración Obama, regresando en el tiempo sobre los pasos de su antecesor George W. Bush (un verdadero halcón de la ultraderecha norteamericana), ha decidido hacer efectivos los deseos estadounidenses de apoderarse, de una manera u otra, del control de Siria, un estado árabe que se ha caracterizado, por muchos años, de ser la nación islámica más abierta, tolerante y predispuesta a la democracia, muy por encima de la imagen que por décadas ha explotado otra nación árabe como es el Líbano. Esto ha obligado a Obama y sus asesores (léase el cerebro negro y maquiavélico del eterno asesor árabe de la Casa Blanca, el poderoso Bandar ben Sultan), a desarrollar una estrategia mediática y de acciones múltiples, mediante la cual se “informe al mundo sobre las atrocidades y asesinatos múltiples del gobierno represor de Bashar, de las represiones políticas a opositores y la corrupción”, estrategia que están llevando a cabo los medios internacionales más poderosos del planeta al ritmo que les tocan las agencias árabes Al Jazeera y Al Arabiya, socias de los intereses pro-yanquis, pro-israelitas y pro-saudíes.

 

 

Millones de simpatisantes se volcaron a las calles en apoyo al régimen de Bashar al Assad

 

Como resultado de lo anterior, tenemos un panorama prefabricado sobre los hechos reales en Siria, cuestión que tiene al mundo ante dos perspectivas muy disímbolas y contradictorias, pues es evidente que no todos se creen “los hechos lamentables, injustificables y sangrientos acontecidos en suelo sirio”, ya que las maniobras estadounidenses de este tipo han sido aplicadas, con los más diversos resultados, en otros puntos del planeta y en otras épocas, buscando el resultado clásico y efectivo: impactar en las masas internacionales y la opinión pública mundial con “información fresca, directa y de enorme efecto político”, lo que en ningún momento significa que tenga credibilidad, que sea comprobada y confiable. Es más, el periodista vasco Txente Rekondo ha afirmado una gran verdad que parecen ignorar los canales mediáticos, tanto favorables como neutrales: Esas piezas dispersas han servido para que algunos intenten impulsar una supuesta coordinación opositora para poner fin al régimen, al tiempo que ocultan las impresionantes manifestaciones de apoyo al régimen en las principales ciudades sirias.

El Fondo es un Complot

Siguiendo el plan estratégico diseñado por un grupo de personajes obscuros que desde las sombras del poder se mueven a placer y con el apoyo irrestricto e ilimitado del gobierno de Obama, la complacencia de Israel y el visto bueno de la plataforma de Arabia Saudita, el complot para desestabilizar al actual gobierno de Bashar al Assad está logrando sus primeros frutos y cumpliendo con los tiempos. Un miembro del cuerpo diplomático sirio, el embajador y Dr. Ghassan Abbas, declaró recientemente en Sudamérica que “existe un plan macabro de carácter internacional para derrocar al gobierno democrático de Siria”. Igualmente el diputado Nasser Kandil, aportó pistas a la opinión pública sobre un complot de un grupo de conspiradores libaneses, quienes utilizarían diversas “herramientas desestabilizadoras para lograr la fragmentación y sitio de Siria e Irán”, naciones enemigas de los intereses norteamericanos, israelíes y sauditas.

 

Bandar Bin Sultan.  Abdul Halim Khaddam.

En efecto, diversas fuentes informativas confiables, de carácter internacional y sin ligas con los gobiernos e intereses del eje Washington-Tel Aviv- Riyad, han puesto en los diversos medios las notas y datos en torno a un complot contra el gobierno sirio, que se viene preparando desde 2007 y en el que intervienen personajes tan maquiavélicos. Tales son los casos del príncipe saudí Bandar Bin Sultan, asesor de presidentes de los Estados Unidos, de Jeffrey Feltman, ex embajador norteamericano en Líbano, el exiliado enemigo de Bashar, el ex vice presidente Abdul Halim Khaddam,  el emir de Tawhid, Abu Jandal Al-Dimashqi, Ayman al-Zawahiri, el economista Mohamed Abdelrahman Abu Musab Al Suri, la Hermandad Musulmana y otros que igualmente han servido a los intereses intrervencionistas estadounidenses, así como al expansionismo islámico impulsado por los sauditas, bajo disfraces muy variados como los de Haitam Maleh y Muhamad al Hassani, supuestos luchadores sociales por los derechos humanos en Siria, quienes son utilizados como “figuras prominentes” y por debajo de la mesa reciben millonarios recursos financieros de la organización Freedom Now, del Fondo Moriah, la Fundación Lantos (a la que pertenece el presidente israelí Simón Peres) y la Real Networks Foundation.

 

Pero para que este complot funcione con precisión y éxito, se ha requerido de otros factores de confluencia como son el político con el largo predominio del partido oficial Baaz, de carácter laico y socialista, el enfrentamiento entre “la vieja guardia política” y la corriente modernizadora, el étnico (los kurdos, los ismaelitas, los drusos, las tribus), el religioso (entre sunitas y chiítas alawíes), así como la importante presencia de cristianos, ya que Siria es el único país árabe con una institución laica que no tolera movimientos islamistas.

 

Las Cartas a Favor de Bashar

Sin embargo, por contraparte, debemos reconocer la capacidad negociadora y la habilidad política de Bashar para hacer y deshacer alianzas, amarres políticos y estrategias internacionales, lo que le han valido el respeto y apoyo mayoritario de su pueblo y del propio ejército, pues guste o no a las malas intenciones de los E.U., la estabilidad y paz de que venía gozando Siria está siendo vulnerada por los insidiosos actos de la mano negra que busca beneficiar el interés mezquino de naciones acostumbradas a fraguar complots y golpes de estado sin importar razones, víctimas y costos. No hay que olvidar que Siria con su actual mandatario ha logrado una nación sin deuda externa y una envidiable tasa anual de crecimiento del 8%, lo que aumentan su atractivo para los estados rapaces e intervencionistas.

 

 

Bandar: La Mano que Mece la Cuna…

Quizás el personaje central, el cerebro destructor y el alma inspiradora de esta guerra político-economico-mediática contra el estado sirio encabezado por Bashar Al Assad, sea el príncipe saudita Bandar bin Sultan bin Abdul-Aziz Al Saud, quien fue educado fuera de Arabia Saudita y al paso de los años logró filtrarse y convertirse en “asesor presidencial” de la familia Bush, puesto desde donde pudo manejar muchos hilos de la política norteamericana en el Medio Oriente, pero siempre a favor de su reino y de los intereses estadounidenses. Claro que desde la era Reagan, Bandar Bin Sultan ya estaba presente y metiendo la nariz en la política exterior norteamericana, aprovechando los gobiernos de derecha y ultraderecha que le tutelaban y otorgaban gran poder de intervención y decisión.

 

Yusef al Qaradawi.          Obama.

“Bandarbush”, apodo que se ganó por su influencia e intimidad con los dos presidentes Bush, fue embajador plenipotenciario de Arabia Saudita en los E.U., entre 1983 y 2005,cargo que le permitió amarrar fuertes lazos de amistad e influencia con cinco presidentes, diez secretarios de estado, once asesores de Seguridad Nacional, dieciséis sesiones del Congreso estadounidense y con personalidades de la prensa y lo medios de esa poderosa nación, para posteriormente ocupar el cargo de secretario general del Consejo de Seguridad Nacional de su padre, el rey Abdulah. Entre sus escándalos políticos está el controvertido asunto de la venta de armas y corrupción de Al Yamamah, su papel en el equipamiento armado y financiamiento de los Contras en Nicaragua, el asunto conocido como el caso Irán- Contra y el derrocamiento de Sadam Hussein.

 

A él se le debe la acción militar contra Irak y además fue el principal apoyo de la agenda de Dick Cheney para “El Nuevo Oriente Medio”, la cual incluía ya, “programas en favor de la democracia en Siria e Irán”. Con Clinton tuvo también sus ingerencias con el llamado Centro de Estudios del Medio Oriente en la Universidad de Arkansas y supo manipular muy bien al entonces aliado estadounidense de Muammar Gaddafi al que Bandar en privado hacía burla al definirlo como “un Jerry Lewis tratando de ser un Churchill”.

 

Trabajando en lo Oscurito y Sin Ser Ubicado

Bandar no ha sido visto en público desde 2008 y se han corrido los informes (falsos desde luego) de que se encuentra muy enfermo, que está bajo arresto domiciliario por un supuesto golpe de estado fallido contra el rey saudita mientras sus opositores alegan que está en prisión (cuestiones que ya se ha encargado de desmentir públicamente su abogado); que ha sido operado dos veces de una enfermedad no especificada en el Hospital John Hopkins de Baltimore, que recibe tratamiento en varios hospitales, etc. Sin embargo Bandar está muy activo y es el principal operador de la “Primavera árabe”, se mueve en las sombras del anonimato y es sobreprotegido por las fuerzas militares estadounidenses, al grado de que, siendo embajador, era él único diplomático extranjero custodiado por la propia guardia presidencial de los señores Bush. Su fortuna es inmensa y posee enormes y lujosos inmuebles en lugares exclusivos de E.U.

 

El Complot Bandar-Feltman para Destruir Siria

En Internet ya está publicada una extensa nota en donde se detalla, paso a paso, el plan que ya se está ejecutando en suelo Sirio y con sus “noticias respectivas en los medios”. Se afirma que el plan Bandar-Feltman comenzó su desarrollo en 2008 con un fondo financiero de dos billones de dólares (cantidad que también está muy por debajo de la verdadera) y básicamente consistía en crear disturbios, manifestaciones violentas y muertes en las calles para ser endosadas al gobierno de Bashar; las consignas serían diseñadas de forma estratégica en torno a ideas como “deseos legítimos de libertad”, “fin a la corrupción”, “la caída presidencial”, etc.

 

Tácticamente se dividiría a Siria en tres grandes áreas de ataque: Ciudades grandes, chicas y aldeas), las cuales serían “trabajadas” a través de cinco tipos de redes: la de “Combustible”, integrada por jóvenes desempleados pero con un buen nivel educativo y decepcionados del gobierno, del sistema; la de los “Matones”, formada por ex convictos, criminales y asesinos, preferiblemente no sirios. La red de los “Sectarios Étnicos”, con gente de las clases más bajas y marginales, sin educación y que apoyen a los grupos opositores al gobierno y su partido Baaz. La red de “Los Medios”, integrada por líderes de opinión que reciban financiamiento de países europeos y no de E.U., y la quinta red, formada por “El Capital”, es decir, comerciantes, propietarios de empresas, bancos y grandes centro comerciales, únicamente de las ciudades de Damasco, Aleppo y Homs.

 

Yamal al Yarrah.       Saad al Harriri.

De acuerdo a este plan, las redes están entrando en acción en ese orden numérico y cuentan con una estrategia mediática consistente en filmar y fotografiar diversas escenas violentas, tanto las que ellos mismos provocan, como algunas en cínico montaje con botellas de sangre, falsos heridos y sujetos que se prestan a actuar escenas de agresiones sufridas, golpes recibidos y “cruel represión por parte de las autoridades policiales y militares”. Bandar ha incluido en esta operación para destruir a Siria y dejarla en manos fundamentalistas islámicos, a psicólogos expertos en asuntos de guerra, quienes se encargan, junto con asesores militares estadounidenses, de hacer trabajo de ideología y convencimiento, especialmente en el sur de ese país y hasta se dan los nombres de estos “lavadores de cerebros” especializados: los libaneses Marwan Hamadeh, Basem al Sabe y Hani Hammoud, quienes reciben la cooperación y asesoría del especialista en rumores y formación de células para crear caos y crisis sociales, Elie Khoury, quien a su vez es financiado por los oficiales de la rama de información de Saad Hariri.

 

Un Testimonio Periodístico Directo

Un ejemplo de lo que se está haciendo en Siria con la estrategia de crear caos y prefabricar imágenes y testimonio falsos con fines mediáticos y de propaganda internacional que justifique, llegado el momento, la “intervención de la OTAN o de los propios Estados Unidos a fin de detener la violencia, las muertes y las violaciones a los derechos humanos en Siria”, es lo publicado por el colega corresponsal de Tele Sur en Oriente Medio, Hisham Wannous, lo cual vale la pena transcribir textualmente por su valor testimonial confiable: “Esta jornada del día viernes ha habido varias manifestaciones pequeñas en diferentes localidades, la máxima en Daara (este) donde entre mil y mil 500 personas apoyaron a la patria, y dijeron algunas consignas contra el Presidente, en ningún momento la policía abrió fuego o lanzó bombas lacrimógenas; únicamente hubo incidentes cuando varios grupos armados abrieron fuego contra ciudadanos y agentes de seguridad y del Ejército, murieron 11 personas, entre ellos cinco agentes de seguridad y hubo 40 peronas heridas, entre ellas bomberos que iban a apagar un incendio en una zona cercana a Damasco”.

 

“Esta información desmiente lo dicho por medios internacionales este viernes, basados en un video difundido por los manifestantes en el portal YouTube donde se les ve protestando “pacíficamente” mientras son reprimidos "por agentes de la Policía". Las fuentes varían al decir que hubo entre 30 y 70 muertos durante el enfrentamiento”.

 

“En otro orden de ideas, las autoridades sirias reportaron este viernes que capturaron en Damasco a agentes infiltrados que tenían en su poder celulares de chips extranjeros y cámaras digitales con escenas prefabricadas de violencia; además de botellas con sangre y sustancias explosivas que se presume serían usadas para causar caos en medio de las manifestaciones en Siria”.

 

También Wikileaks Aporta Información

Washington financió en secreto grupos de la oposición en Siria. Financiamiento "tiene el propósito de derrocar al gobernante, Bashar Al-Assad", reveló cable confidencial del Departamento de Estado. El portal de Internet WikiLeaks reveló un nuevo cable confidencial del Departamento de Estado de Estados Unidos (EE.UU.) que indica que Washington financió en secreto a grupos de la oposición en Siria, así como a una emisora opositora al Gobierno del presidente sirio, Bashar Al-Assad.

 

El diario The Washington Post publicó este lunes los cables, donde el Gobierno estadounidense señaló que el financiamiento de los grupos opositores sirios "tiene el propósito de derrocar al gobernante (de Siria), Bashar Al-Assad". Los mensajes diplomáticos reservados de EE.UU. señalan que el Departamento de Estado ha canalizado hasta seis millones de dólares a este grupo desde 2006 para la operación del canal de televisión por vía satélite y la financiación de otras actividades dentro de Siria, explica el diario.

 

El dinero estadounidense para la oposición siria "empezó a fluir bajo el (ex) presidente George W. Bush, después de que él congeló, de hecho, los vínculos diplomáticos con Damasco en 2005", agregó The Washington Post. La financiación continuó al menos durante un periodo del mandato del actual presidente de Estados Unidos, Barack Obama. El diario comentó que en enero pasado, el Gobierno estadounidense puso en Damasco "un embajador suyo por primera vez en seis años". El diario también explicó que parte del dinero fue destinado para "apoyar programas y a disidentes dentro de Siria", pero The Washington Post no quiso divulgar nombres y detalles de los programas a petición del Departamento de Estado de EE.UU., que ha indicado que "tales revelaciones podrían poner en peligro la seguridad personal de los receptores".

 

Ayman al Zawhiri.              Feltman.

Tras estas nuevas revelaciones de cables secretos del Departamento de Estados de EE.UU., Washington no ha hecho comentarios sobre este caso, ni ha respondido a preguntas sobre la financiación de la estación de televisión Barada, con sede en Londres (capital inglesa) que comenzó sus transmisiones en abril de 2009 y ha intensificado su labor "con la cobertura de protestas callejeras" que se registran actualmente en Siria. El director de noticias de Barada TV, Malik Al Abdeh, aseguró que no tenía conocimiento de esta financiación. Según él, el canal "sólo ha recibido dinero de empresarios independientes sirios". El Gobierno de Siria ha denunciado que grupos infiltrados pagados por sectores externos han incitado a la violencia que se registra en el país desde el pasado 15 de marzo. Estas acciones han generado la muerte de civiles sirios.

 

Los Infiltrados

El pasado mes de marzo, un ciudadano de doble nacionalidad, egipcia y estadounidense, que fue detenido en medio de hechos de desestabilización registrados en Siria, confesó en declaraciones a una televisora que había recibido dinero por parte de extranjeros para tomar fotos que muestren convulsión en la nación árabe y con ello generar caos. El pasado martes, el Gobierno de Siria logró aprehender a integrantes de células terroristas responsables del caos en las manifestaciones antigubernamentales. Según los testimonios de los tres integrantes de la célula, ellos efectuaron actos de sabotaje y destrucción a instituciones públicas y estatales y abrieron fuego contra ciudadanos y hombres de seguridad.

 

 

Los tres terroristas, de nacionalidad siria, declararon que seguían ordenes de una parte exterior, específicamente del diputado libanés Yamal Al-Yarrah, miembro de la corriente Al-Mustakbal (el Futuro) presidida por Saed Al-Hariri, hijo del ex primer ministro Rafik Al-Hariri. Según los detenidos, recibían armas y dinero del diputado Yamal Al-Yarrah. Las armas que tenían eran fusiles, pistolas, granadas y dinamita. Francotiradores no identificados dispararon el jueves contra una patrulla del Ejército de Siria que realizaba labores de vigilancia en Banias, al noroeste de la nación, dejando un soldado muerto y otro herido, según reseñó la agencia estatal Sana.

 

Desde mediados de marzo, el país medioriental ha sido centro de manifestaciones por parte de la población en demanda de una reforma política y la derogación de la ley de emergencia, vigente desde 1963. Reformas que ya han sido aprobadas por el presidente de la nación Bashar Al Assad. El presidente sirio manifestó este domingo que su país está sumido en reformas globales y reiteró su acusación contra los "poderes externos" que conspiran con actos violentos en las manifestaciones. Las autoridades sirias aseguran que la violencia ha sido sembrada por bandas armadas que han arremetido contra los manifestantes y fuerzas el orden provocando el caos en varias ciudades.

 

Hacia el Estado Islámico de Siria: El Embate Fundamentalista

A propósito de las intenciones evidentes de entregar a los fundamentalistas islámicos al actual estado sirio, sin importar las graves consecuencias que esto conlleva, como ya se ha visto en otros países sacrificados por las maniobras estadounidenses y de sus aliados, pero que en el caso de Siria serían de carácter catastrófico para el Medio Oriente, los procesos de paz y el occidente encabezado por la Comunidad Europea y los Estados Unidos, ha trascendido que ya desde 2007, Al Qaeda y su brazo militar en el Levante han venido realizando operaciones bélicas y terroristas contra las comunidades cristianas de Siria y Líbano con la participación de los ya citados implicados Abu Jandal Al-Dimashqi, cabeza de la Jihad en “La Gran Siria” y el emir de Tawhid, quienes se han puesto en contacto con Ayman al Zawahiri y el emir del Irak islámico “para exportar la jihad hasta el Gran Estado Islámico de Siria”, como parte de un gran proyecto fundamentalista para hacer de Líbano y de Siria otro Irak, para sumarse, a su vez, a Jordania y Palestina en el proyecto islámico de expansión política y religiosa.

 

Los emires de la guerra santa.

Aquí aparece en escena otro individuo siniestro, un terrorista fanático y movedizo llamado Abu Mohjen, un palestino de treinta años a quien se suponía muerto Irak, según reportes provenientes de ese país, y quien sin embargo anda vivito y haciendo de las suyas en diversas partes del Medio Oriente, gracias a que sabe disfrazarse astutamente, habla varios idiomas y utiliza diversas personalidades. Sin duda un tipo altamente peligroso, fundamentalista intolerante y fanático que en mucho ha estado contribuyendo a la campaña que respalda, según fuentes regionales, el propio Osama Bin Laden a través de Ayman al Zawahiri, quien le envió con el emir de Irak para “exportar mujaidines islámicos a suelo sirio, a fin de establecer lo que llaman el Gran Estado Islámico de Siria”; también se están utilizando los reclutas que ha logrado atraer entre los palestinos refugiados en diversos campamentos de la región, el economista de Aleppo, Mohamed Abdelrahman Abu Musab Al Suri, uno de los líderes de Al Qaeda que se dice está actualmente detenido en Siria precisamente bajo los cargos de reclutamiento ilegal de refugiados.

 

Estas maniobras terroristas incluyen diversas amenazas de muerte contra el presidente sirio Bashar, lo que muestra otra ala de ataque contra Siria por parte de los jihadistas de Al Qaeda en Levante, cuyo fin es apoderarse de manera definitiva e irreversible de Siria, Jordania y Líbano para el mundo islámico.

 

Epílogo…

Así las cosas, Siria es el centro de un conflicto de intereses internacionales y un jugoso botín para el fundamentalismo islámico; el mundo enfrenta una agresión más de una nación cuyo pecado ha sido ser un estado negociador, de estabilidad interna y de equilibrio dentro de una ardiente y violento Oriente Medio. Los medios se encargan de completar la labor de desinformación, de difamación y engaño que ayudan a justificar el ataque, por diversos frentes, de un país que hasta hoy era ejemplo de trabajo, de respeto y un verdadero bastión de tolerancia y pluralidad cultural y confesional en una zona que no sabe vivir en paz y cuyos intereses chocan con otros intereses extranjeros.

 

Si Estados Unidos y sus socios del Eje Washington-Tel Aviv-Riyad, logran su objetivo, habrá caído el último dique que contenía el expansionismo islámico, el último reducto para lograr una verdadera paz en el Oriente Medio y la única nación árabe diferente, plural y progresista que podía llevar de la mano a su homóloga de Líbano. La moneda está en el aire y tal parece que los halcones intervencionistas quieren salirse con la suya, aunque después, tengan que hacer otra guerra para contener a su enemigo natural de oriente: el arabismo fundamentalista, intolerante, violento y opresor…Quienes cubrimos la información desde el lugar de los hechos, lamentamos que al mundo se le informe lo que le conviene a una potencia y a sus socios, en lugar de lo que en realidad está pasando, una vez más la mentira y la calumnia asesinan a la verdad.

 

 

 

 

 

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