ESFERA HUMANA

Martes, 06 de Octubre de 2009 10:49 |

Author: Enrique Castillo Pesado |

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Edición 219

López Obrador, ¿sabe escuchar a la gente?
Autorizarán la nueva cédula de Identidad Ciudadana?
Alberto de Mónaco no se casa

¿Tendrán miedo de decirle –amigos, consejeros o allegados-- a López Obrador que la mayor parte del pueblo mexicano no lo quiere ni lo querrá de primer mandatario (aunque él se autonombre Presidente Legítimo)? Eso de que su voto duro es del de 15%, francamente no lo creo. Si hubiera votaciones ahora, conseguiría entre el 6—8% de los votos. O sea, como se ven las cosas al corto tiempo, sus acciones y declaraciones le restarán posibilidades para convertirse en un verdadero candidato de una izquierda moderada. Hace unos días, López Obrador formalizó --¿finalmente?-- lo que todos pensamos desde hace tiempo: “Volveré a contender por la presidencia en 2012”. Por ende, se reeligirá. Sé que dio a entender que podría ser candidato presidencial nuevamente por el PRD, pero explicó que, de lo contrario, sería candidato –como también lo sabemos todos-- por otros partidos. Hablo del PT y Convergencia. Después de 36 meses de gobierno de Calderón, los analistas y la gente en general, se preguntan: ¿algún asesor le habla al oído al Peje? ¿Alguien, --en sus círculos íntimos, laboral, profesional o de Imagen Pública-- se atreve –o se ha atrevido-- a tener versus o conversaciones en profundidad, hablándose con la verdad y cordura, de lo que significan los datos duros? ¿No sé si entre sus familiares y amigos tengan el valor de contradecirlo y señalarle: “Presidente Legítimo, usted no debe ser reelegido nuevamente candidato presidencial. Las encuestas no están a favor de su estado. Acaso, en un por ciento mínimo. Habrá algún político –Camacho o Muñoz Ledo—que le indique: “Andrés, ya no debes competir en el 2012. Sí, cumpliste con tu misión histórica. Estuviste a punto de ganar la presidencia, pero en el 2012 no vas a ganar”. López Obrador perjudicaría aún más a la izquierda electoral. En lo personal, yo me decanto por una social—democracia o una izquierda moderada moderna. López Obrador está situado en un remotísimo tercer lugar que no va a servir de gran cosa ni a su movimiento, salvo por el dinero que va a agenciarle al PT y a Convergencia. ¿Pensaría relanzarse en 2018? Algunos conversarán con López Obrador y le dirán que, para su mala suerte (si piensa que por culpa de eso que llama “los medios, con honrosas excepciones”, o por culpa de lo que él denomina “la mafia”) él es, hoy, y rumbo al 2012, el Roberto Madrazo de 2006? Andrés Manuel tiene que estar consciente de que no existe una sola encuesta que él encabece. La población actual tiene ahora la peor imagen de este personaje político y no volverán a votar por él nunca más. Recuerden que Madrazo no quiso entender ese factor, e independientemente de las traiciones que sufrió dentro del PRI, se fue hasta al tercer sitio. Posiblemente, el voto duro de AMLO lo lleve al 15% y con ello le restará posibilidades a un mejor candidato competitivo de la izquierda (¿Marcelo Ebrard?). Por último, hay que reconocer que López Obrador no escucha a ¡nadie¡

NUEVA IDENTIFICACIÓN

María de las Heras informó que “el gobierno federal anunció que dará inicio la credencialización de toda la población (niños, adultos), con la nueva Cédula de Identidad Ciudadana que contará con fotografía, huellas dactilares y huellas de iris, y servirá como identificación oficial para todos los trámites”. Esta nueva identificación provocará –y estoy seguro de ello-- comentarios a favor y en contra, “ya que la opinión pública no termina por aceptar del todo este asunto de la nueva cédula y no comprende porque ahora hay que ¿invertir millones de pesos? en este materia, cuando la situación presupuestaria del gobierno ha obligado a recortar el gasto” (¿?). Nuestro gobierno anunció que ya no cuenta con presupuestos en muchos rubros, entonces ¿por qué insistir en una nueva credencial? De las Heras apunta que “7 de cada 10 personas están de acuerdo con tener una cédula de identidad”. ¿Esto tendrá la ventaja de ahorrarnos trámites engorrosos? Por otro lado, esta nueva cédula –se percibe-- podría servir para el control de delincuentes y estafadores. La verdad es que les preocupa que el gobierno tenga una base de datos de tales características, porque piensan que se puede prestar a malos manejos. Esto también está para pensarse. Y no es que nuestros compatriotas se estén volviendo paranoicos. La verdad es que no sería la primera vez que esto se repitiera o ocurriera. De las Heras indica que “ya se nos olvidó que la información del padrón electoral terminó en una empresa de Miami o que quien debía acumular la información del registro de automóviles resultó ser un prófugo de la justicia argentina”. ¿Quién nos asegura a los mexicanos que ahora no se hará un mal uso de la información recabada para la cédula ciudadana? En el libro de Juan (8:32, Nuevo Testamento) se habla de que “la verdad nos hará libres”. Entonces, debemos ser honestos. No han sido confiables los que cobraban en las nóminas oficiales y ahora están prófugos de la justicia o encarcelados, “con el agravante de que la nueva cédula incluirá también los registros de niños y adolescentes”. ¡Como para que cayera en manos de esos funcionarios corruptos que señalan –no nos consta— informaciones que les sirvan a los secuestradores y estafadores¡ Estoy de acuerdo con muchos analistas que ahora “no es el momento de levantar el censo ciudadano ni económicamente hablando ni en términos de las relaciones gobierno- sociedad, que dicho sea de paso, están muy deterioradas”. ¿O qué, va a resultar que las autoridades se volvieron sabias para aplicar las leyes?.

MEDIO SIGLO

A Alberto Mónaco lo conozco desde la boda de su hermana Carolina con Phillipe Junot. Soy pariente de los De Teresa y Polignac, primos de los Grimaldi—Polignac. En México falleció recientemente doña Marie Therese Polignac de De Teresa, prima hermana del príncipe Rainiero de Mónaco. Por ende, he estado en el Principado de Mónaco en cinco ocasiones y, en una de ellas, presenté al príncipe Alberto con la periodista mexicana Rocío Villagarcía que quedó estupefacta. Hoy, Alberto ha llegado a los 51 soltero, una condición sin importancia para un ser anónimo pero no para un príncipe, obligado a tener descendencia, a perpetuar la dinastía. Porque Alberto, de quien se especuló durante monaco mucho tiempo sobre su orientación sexual, tiene dos hijos de mujeres diferentes, pero no se casó con ninguna y las leyes de sucesión del principado católico marcan que sólo los niños nacidos dentro de la institución matrimonial pueden acceder al trono. Alberto de Mónaco cumplió medio siglo y en el principado todo el mundo daba por hecho que esta vez habría anuncio de boda. Hasta la revista Point de Vue ha dedicado la portada de su último número al único hijo varón que tuvieron Raniero y Grace. En ella se ve a Alberto junto a Charlene Wittstock, la nadadora que ha dejado todo, incluso su preparación para los Juegos Olímpicos de Sydney, por amor a su príncipe. Fuentes próximas al palacio Grimaldi, según Point de Vue, fijaban en los próximos días como fecha del anuncio de su compromiso y aseguraban que la Casa Real ya se ha puesto en marcha con los preparativos de la boda, que se celebrará en septiembre. Pero, a última hora de la tarde de ayer un comunicado oficial del palacio de Mónaco desmentía el enlace. Para los monegascos, Charlene es una perfecta sucesora de Grace Kelly, también rubia, joven y atlética. Grace era actriz de cine y Charlene, deportista. La posible “futura princesa de Mónaco” vive en un apartamento, y acompaña a Alberto en muchos de sus viajes. Al no estar comprometidos el protocolo se ve obligado a hacer equilibrios para poder incluirla en la vida de Alberto. Quienes la tratan ya como alguien más de la familia son las hermanas del príncipe, Carolina y Estefanía. Las revistas del corazón de medio mundo mostraban imágenes de la pareja pasando unos días de vacaciones, invitados por Carolina y su esposo, Ernesto. Cientos de invitados estuvieron en Mónaco –también este columnista-- para festejar 51 años de Alberto en una fiesta primero popular y luego privada. No asistió Charlene Wiitscock. No sabemos en el futuro que sitio ocupará la ex campeona de natación en el protocolo? Con este príncipe nunca se sabe. Y hasta la próxima, ¡abur!