Jueves, 15 de Agosto de 2019 17:02 | 
Author: Enrique Pastor Cruz Carranza | 
| Edición 392 |
A FUEGO LENTO
Epitafio con letras de sangre
Enrique Pastor Cruz Carranza
“Lo importante es no dejar de hacer preguntas”
Albert Einstein
Cada vez que miramos en las noticias un nuevo crimen de algún comunicador en el país, la pregunta sigue siendo la misma: ¿Quién en es el siguiente?
Cada seis meses por formar parte del Mecanismo Para La Protección de Defensores de los Derechos Humanos y Periodistas, recibo la visita furtiva de un evaluador de la SEGOB, quienes solicitan a los incluidos en este programa de corte institucional constituido por reclamos internacionales, ante la creciente cifra de periodistas asesinados, desplazados y bajo acoso de los tres niveles de gobierno, por su trabajo informativo, destacando el tremendo detalle que, ello significa en los estados de nuestra patria, portar un pasaporte a la eternidad.
SIN POSIBILIDADde que sean castigados los autores intelectuales y materiales, sin ser criminalizados por los hechos, completando la perversa faena de descrédito y sospechas, dejando frente al escarnio institucional, a las familias de las víctimas en descredito, casi justificante.
Al margen de la vergüenza a nivel mundial, de ser el país más peligroso de América y de los tres primeros del mundo para ejercer esta actividad, casi 900 personas se encuentran bajo este programa interinstitucional donde la sensación es de no haber entendido la magnitud del problema.
Un encuentro patético
La cita fue concertada el jueves 30 de julio, por conducto de un correo electrónico a nombre de Roberto Reyes Morales confirmándome requeriría una contraseña para el efecto y que tenían —aparentemente—, pleno conocimiento de mi expediente 139/2014/P/O.
Previamente a la “evaluación” este día amanecemos con la notica recurrente de haber encontrado en la cajuela de un vehículo, asesinado mostrando lesiones contusas en el rostro y área del cráneo, al colega Rogelio Barragán director del Portal de noticias Guerrero al instante.
No podía ser más patético y doloroso el encuentro con los representantes de la mesa devaluatoria, quienes indiferentes a mis comentarios al respecto, y con apuros clásicos de una burocracia atenta a sus horarios de alimentación, buscaron terminar diligentemente mi asunto.
En esta institución donde han pasado varios subsecretarios de Gobernación y les ha servido de plataformas de lanzamiento a cargos de elección popular, Secretarías de Estado o para viajar por el mundo, en busca del eslabón perdido entre la protección y la eficiencia, las cosas parecen estar bajo una percepción donde los criterios de austeridad con el sentido humanista y el cumplimiento de las obligaciones , se topan con la demoledora realidad de seguir galopante los crímenes y perseverante en inercia hasta dentro de la 4T , la ineptitud de salvaguardar la vida de defensores de los derechos humanos y periodistas.
Mientras escuchaba los criterios expuestos para considerar se deban reducir mis disfuncionales (nunca sirven por presunta carencia presupuestal), a mi mente se aparecían los eventos sufridos en mi integridad y la forma como eran subestimados, me agraviaron pensando sí esos criterios fueron los mismos esgrimidos para dejar sin efecto en la humanidad de Rogelio Barragán o el también “desechado” colega de Quintana Roo, Francisco Romero Díaz de Playa News quién fuera parte del Mecanismo y a pesar de las amenazas, su ejecución se realizó sin sobresaltos .
Después de escuchar los endebles argumentos y la decisión tomada con anterioridad, recibí la gracia de poder expresarme en cinco minutos ante las sentencias tomadas.
Mis argumentos por encima de toda visión burocrática fueron para recordarles a los presentes, lo que se discutía; la seguridad y vida de seres humanos.
Señalé la frivolidad y falta de sentido humano de quiénes en el confort de una mesa con surtido variado de café y galletitas finas, prácticamente juegan a los “cesares” en un circo romano donde las víctimas son periodistas y la impunidad determina quienes pueden seguir en la protección o no.
Debo reconocer la actitud positiva y propuesta de asesoría humanitaria de quien estaba como representante del “Alto Comisionado de Las Naciones Unidas para los Derechos Humanos”, la oficial de derechos humanos Clara Lefrancois la cual no desestimó como último recurso de salvaguardar la vida de mi familia y propia.
Más que un simple cumplimiento
EL MECANISMOPara la Protección de los Defensores de los Derechos Humanos y Periodistas no puede ser un simple cumplimiento de exigencias globales, sino el instrumento garante de seguridad y reducción de estos eventos donde la vida es una estadística de impunidad y las manifestaciones hipócritas en forma de condolencias, ante hechos consumados se convierten en un eslabón anexo de la cadena interminable de muerte, mordaza y simulación.
A diario en su conferencia matutina en Palacio Nacional el presidente Andrés Manuel López Obrador intercambia ideas, puntos de vista, polemiza y responde la mayoría de los cuestionamientos que se le exponen sin ninguna restricción.
El Ejecutivo Federal pide a los periodistas de investigación realizar su trabajo, colaborar en la información sustentada en esa práctica, aportando datos, rompiendo bloques mediáticos, eliminando complicidades por dádivas a cambio de ocultar o cuestionar bajo consigna.
Es cierto, muchos considerados iconos del modelo neo liberal, quienes ayer justifican todo creando apologías del poder depredador en turno, disfrutando las mieles de ser coros de la vanidad en concierto de adulación, ahora se desgarran las finas vestiduras por la 4T.
Pero también es cierto, que los crímenes a comunicadores no cesan y los actos de intolerancia radical, se agudizan en los tres niveles de gobierno.
Es de vital urgencia, la SEGOB por medio de la subsecretaria de los Derechos Humanos a cargo de Alejandro Encinas presten mayor atención a quienes se convierten en jueces de factibilidad en el Mecanismo y fortalecer su integración con mayor sentido común y humano.
No se puede desestimar en un solo fin de semana, se prive de la vida a tres periodistas, acumulando 10 en lo que va de este año.
No podemos callar ante la simulación que se dan en algunos estados como Veracruz con “Mecanismos chafas” de simple demagogia y simulación.
Las amenazas continúan siendo pan de cada día.
Lo mismo por darle curso a reclamos obreros en casos como Oceanografía en Isla del Carmen, o la molestia por solicitar directamente al presidente AMLO en la conferencia mañanera, los contratos otorgados en invitación restringida a las compañías Marinsa y Marine Energy por parte de Pemex, contraviniendo las órdenes de no repetir historias de tráficos de influencias, de la presunta poderosa Prima Lupita de Tabasco y sus socios petroleros en proceso de renovada y productiva trasmutación a Morena, saqueadores vitalicios de la mafia petrolera en la industria.
¿Quién es la siguiente víctima?
¿POR SEGUIRdenunciando estos actos donde se trafica familiaridad y se crean complicidades nos seguirán, acosando, vetando, linchando en campañas de odio, y asesinando a mansalva?
¡Pobre México sin periodismo libre!
¡Pobre democracia manchada de sangre; de líderes sociales y periodistas ejecutados e… impunidad!
¿Cuantos más se acumularán y quién es la siguiente víctima?
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